jueves, 14 de abril de 2016

Galletas de la fortuna



Por: Yalo Tsé

º Todo mundo cree saber cómo debe ser un ser humano.
 
º Ese narcisismo tuyo tan arraigado que tus labios besan en sentido contrario.
 
º No te des por vencido a la primera dificultad. Hazlo antes.

º Es retrógrado y nulo tener un ideal: la moda es tener actitud. Ya no importa el ser sino la personalidad, la envoltura.
 
º ¿Más falso que una moneda con dos caras? Más falso que una frase de amor en un burdel.
 
º Somos expertos en inventarnos deberes fatigosos, superfluos y equívocos; de nulo provecho para nosotros y para el prójimo.
 
º Es la hora de frotar esa desgarradura espumosa y de la rencorosa añoranza por aquello que la causó.
 
º Ingéniatelas para que tu conducta sea más importante que tus creencias.
 
º Para aprender sobre la estupidez hay que procurar observarse uno mismo con mucho detenimiento.

º De nada sirve arrancar el dolor; queda una oquedad carroñera y fétida, y para colmo nada liviana.
 
º Debes ser realista: hazle caso a tu amiguito imaginario.
 
º Nunca confiar en alguien que preconiza: "Las cosas pasan por algo".
 
º En cada época, toda generación piensa que es crucial su intervención en el devenir de la humanidad.
 
º Es más frecuente el no cambiar de opinión o punto de vista por pereza que por orgullo.

º Aléjate de esos seres con optimismo inoxidable.
 
º No te esmeres tanto en encontrarte a ti mismo. Te puedes llevar una gran decepción.
 
º Renegar de nuestros vicios y defectos; repudiarlos y zaherirlos para después recapacitar, echarlos de menos, implorarles perdón y pedir la reconciliación.