Manchas y chorreaduras muy estéticas, ejemplo paradigmático del neo-abstractismo post-rupestre, un movimiento artístico derivado del embarradurismo improvisado e impulsivo que hace de la emoción sincera su principal rasgo estilístico. Con la espontaneidad como dogma, todo objeto arrojadizo capaz de salpicar es válido. Verbigracia: un huevo negro. La técnica alcanza cotas de esplendor a la contra: la destreza del descaro, el bellaco talento del ocio. Hay que dejar escurrir la inspiración. Los pintarrajeos son merecedores de una pared con preeminencia en un museo y una sesuda reseña. Este cuadro excelso se titula "Salpicón fúnebre", y por el monto que pagué por él uno podría adquirir un submarino nuclear o un telescopio satelital de última tecnología. El presupuesto de todo un año de varios países pobres. No hay que olvidar que el precio de una obra, está en función no sólo de sus atributos artísticos, sino de su procedencia: quién o quiénes han sido los poseedores de una obra tan magna; y ésta, estuvo en las manos del mismísimo Rico McPato. El nombre del ex propietario le da una magnificencia adicional a la pintura. Una creación digna de figurar en la sala de espera de un dentista.
La obra fue retocada el años pasado por su autor, con el único propósito de mejorar su indiscutible calidad.