Me llamo Juana
Inés y soy cocinera, "la peor de todas". Hoy te quiero compartir mi
receta de turco de maíz cacaguazintle, misma que aprendí de las carmelitas
descalzas patasanchas y fui perfeccionando en San Jerónimo. Seguro les gustará,
y de no ser así, prometo cortarme cuatro o seis dedos de cabello.
Ingredientes:
Maíz, azúcar,
manteca, huevos, almendras, piñones, pasas y una botella de vino (grande).
Preparación:
Pones el maíz
como para nixcomil. Primero lo lavas muy bien y te tomas una copita de vino,
así como para dar chispa a los sentidos. Despuntas cada grano cuidadosamente, y
entre grano y grano, un sorbito de vino del tamaño de un dedal muy tupido.
Luego de despuntar el maíz se muele como para tamales. Otro traguito. Después
la masa se revuelve con manteca, azúcar y las yemas que quieras, siempre y
cuando no sean muchas. Se llena de nuevo la copa de vino.
Se pican las
almendras, los piñones y las pasas. Pausa de nuevo para libar las vinícolas
delicias.
La masa preparada
previamente se zarandea y palmotea como para tortillas de metate. Se prueba una
pelotita minúscula de la revoltura para ver si tiene el sabor y la consistencia
que mejor convienen. Para que el paladar recobre sus cualidades, un poco más de
vino con estas palabras: In vino veritas. Se acomoda la masa en una cazuela untada con manteca. Se aplana
con un palote y se agrega el picadillo de pasas, almendras y piñones. Aquí ya
se puede prescindir de la copa y tomar a pico de botella.
Se pone todo
el conjunto en un comal con lumbre moderada. Mientras se realiza el cocimiento
se espolvorea azúcar y se bebe a discreción. Después de cocido se aparta y se
deja enfriar en un plato. Se sirve el turco con una botella de vino.
Si todos los
miembros de mi cuerpo fuesen lenguas no me bastarían para tanto deleite. Les
dije que les iba a gustar.